¿Por qué nos reímos?: principales modelos teóricos

Alguna vez te has preguntado: ¿por qué nos reímos? La risa es algo propio del ser humano. Es una expresión que realizamos desde que somos muy pequeños, inclusive, desde antes de aprender un idioma o lenguaje.  Resulta común pensar que reímos cuando estamos alegres o cuando nos divertimos, pero ¿son sólo esos los motivos por los que surge la risa?

La intensidad de la risa puede ir desde una sonrisa disimulada hasta una estruendosa carcajada. Para toda esa gama de risas existen motivaciones o razones muy variadas. Lo que sí tienen en común es que cuando reímos estamos emitiendo una respuesta emocional que tiene su origen en el cerebro.

De acuerdo con investigaciones realizadas en la Universidad de California, esa zona del cerebro se encuentra ubicada en la circunvolución izquierda frontal superior y mide alrededor de dos centímetros cuadrados. Esta ubicación es la parte más evolucionada del cerebro, por ello se dice que “para reírse es necesario ser inteligente”.

Esas mismas investigaciones, dirigidas por el Dr. Itzhad Fried, concluyen que si estimulamos esa parte del cerebro con electrodos, el paciente reirá. Inclusive asegura que la intensidad de la risa será directamente proporcional al nivel de estimulación suministrado al cerebro.

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A lo largo de la historia, han sido muchas las personas que han tratado de explicar por qué nos reímos. Algunos de ellos han sido Platón, Aristóteles, Cicerón y Freud. Lo cierto es que no existe un modelo único que explique el origen de la risa en su totalidad. Todas estas teorías describen motivos parciales. Veamos a continuación las más importantes.

Principales teorías sobre el origen de la risa.

Teoría de la descarga emocional

Esta teoría establece que la risa es una forma de descarga que tiene nuestro organismo ante situaciones de tensión. Algunos ejemplos de esta risa es cuando estamos nerviosos, asustados, aburridos, etc. Para ser más explícitos es la típica risa que surge en los niños cuando los regañamos, o la incómoda risa que sufren algunas personas cuando están en un funeral. También explica por qué nos reímos cuando alguien se cae. En el fondo lo que estamos es descargando alguna tensión intensa o acumulada.

Esta teoría también explica por qué los grupos sociales menos favorecidos suelen estar conformados por personas que ríen con mucha facilidad. Realmente ríen como método de descarga ante sus problemas o situaciones del entorno.

En todos estos casos, la risa se convierte en un mecanismo para protegernos, para evadir o para mostrar una fortaleza ante las situaciones que se nos estén presentando. En muchos casos son usadas para evitar la depresión y la ansiedad, o por lo menos para huir de ellas.

Teoría de las incongruencias

Esta teoría establece que la risa ocurre porque en un mismo contexto surgen dos conceptos o ideas que son incongruentes entre sí. Veámoslo de esta manera: en toda narración existe una lógica. Cuando alguna situación rompe o contradice esa lógica, nuestro cerebro reacciona produciendo la risa.

Un ejemplo puede ser dos personas de nacionalidades diferentes comunicándose en un idioma que, por lo menos alguno de ellos, no domine. Los malos entendidos en los conceptos pueden llegar a generar risa. Es una reacción del cerebro ante algo inesperado, algo absurdo o incompresible, propio en las diferencias de los idiomas. Cuanto más absurdo el contexto, más gracioso será y más risa generará.

Teoría de la caricaturización

La caricaturización de personalidades públicas o grupos étnicos es una fuente de risa muy común. Es por esta razón que existen tantos humoristas o imitadores en el medio del espectáculo. Realmente, lo que se hace es exagerar algunos rasgos, expresiones o características de las personas, generando risa y buen humor. Es importante destacar que, en base a esta teoría, en ningún momento se pretende ridiculizar o hacer menos a nadie.

Teoría de la superioridad

Es una manera agresiva y nociva de generar la risa. Algo que debemos evitar. Su origen está cuando reímos al burlarnos de alguien, cuando buscamos empequeñecerlo. Este tipo de risa conlleva detrás sentimientos de desprecio y violencia. Es una fuente de placer sumamente tóxica que debemos eliminar como sociedad.

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Teoría de la actuación

Esta teoría establece que, en las situaciones cotidianas, solemos actuar como si muchas cosas nos causasen gracia, cuando realmente no es cierto. Es cierto que la risa de algunas personas se puede contagiar a otras. Esto puede desencadenar una escalada de carcajadas, por ejemplo en un entorno laboral, ante situaciones muy simples, que por sí solas no generarían la más mínima sonrisa.

Diversas estadísticas indican que suelen reír más las mujeres que los hombres. Así como que ríen más, los que más hablan.

Independientemente del origen, cuando reímos, nuestro cuerpo recibe múltiples beneficios. Así que, en la medida de lo posible, trata de incorporar la risa como parte de tu rutina diaria. A fin de cuentas es gratis y te hará sentir mucho mejor.

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