Flores de Bach: beneficios, contraindicaciones y cómo tomarlas

La terapia a base de Flores de Bach se está convirtiendo cada vez más en una solución ante muchos problemas de salud. Detrás de cada enfermedad física existen, con frecuencia, sentimientos negativos y bloqueos psíquicos desconocidos. Algunos ejemplos son: el miedo, la inseguridad, la depresión, etc.

La terapia floral ayuda a solucionar los bloqueos en el plano psíquico. De esta forma, se restablece el equilibrio anímico y se reactivan las fuerzas curativas del organismo.

Algo importante a tener en cuenta es que, los tratamientos de flores de Bach, están entre las terapias aceptabas y recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Acompáñame a profundizar un poco más en este efectivo y natural método de curación.

¿Qué son las flores de Bach?

Las Flores de Bach son un conjunto de esencias que se extraen de algunas flores silvestres. Las propiedades curativas de estas flores fueron descubiertas por el Dr. Edward Bach entre las décadas de los años ’20 y ’30 del siglo pasado en Gran Bretaña.

El Dr. Bach percibía al ser humano como un todo formado por cuerpo, mente y espíritu. Sostenía que el desequilibrio emocional era la primera causa de una enfermedad. Por tanto, si las terapias se enfocaban en equilibrar las emociones, el paciente lograría curarse y más aún, evitaría enfermarse en el futuro.

En base a lo anteriormente descrito, el Dr. Bach, se enfocó en desarrollar una forma de medicina con una óptica diferente. Tal y como afirmada, lo importante no era la situación que estuviese viviendo el individuo, sino cómo reaccionaba ante dicha situación. Es decir, es una medicina que se fundamenta en la conducta.

En los tiempos actuales, en donde la humanidad atraviesa por grandes dificultades, las flores de Bach pueden ser de gran utilidad para ayudar a equilibrar las emociones. La terapia floral es una excelente acompañante de la medicina alopática. Cuando las combinamos se obtienen rápidas mejorías.

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¿Cómo funcionan las flores de Bach?

Estas esencias son infusiones solares de flores en agua de manantial, estabilizadas y conservadas con brandy.

Las plantas, los animales y los seres humanos se expresan como estructuras vibratorias definidas. Esto se conoce como Energía Biofísica. Cada flor tiene una estructura genética y energética que se puede medir como una estructura vibratoria, similares a las vibraciones de la luz.

Cuando una persona tiene pensamientos, sentimientos y emociones encontradas, esta vibración se ve alterada. Los pensamientos, sentimientos y emociones positivas limpian y elevan el campo vibratorio; es decir, aumentan la frecuencia vibratoria. Mientras que los pensamientos, sentimientos y emociones negativas ensucian y degradan el campo vibratorio; es decir, bajan la frecuencia vibratoria.

Si un individuo mantiene emociones negativas durante algún tiempo, comenzarán a aparecer los primeros síntomas como mareos, dolores de cabeza, malestares estomacales e intestinales, problemas circulatorios, etc. Si estas emociones no son corregidas, el individuo se estaría encaminando rumbo al desarrollo de una enfermedad.

La terapia de flores de Bach equilibra estas vibraciones. Por tanto, desaparecen los malestares, se modifica la manera de pensar y sentir del individuo, y cambia la manera de abordar los problemas que se le presentan. Es por esto último que se dice que la terapia floral tiene un carácter curativo así como preventivo, pero adicionalmente, es considerado un camino hacia el crecimiento personal.

Algo importante a tener en cuenta es que las flores de Bach deben ser preparadas y administradas por terapeutas debidamente calificados para ello. Si quieres comenzar a utilizar este tipo de terapia, acude con profesionales capacitados.

¿Para qué sirven las flores de Bach?

Las flores de Bach aportan múltiples beneficios a personas de cualquier edad, desde bebés hasta personas de tercera edad o ancianos. En caso de administrarse en bebés, el terapeuta preparará la fórmula con la dosis adecuada y empleando un conservante diferente al brandy.

Las esencias florales no tienen una acción química en el organismo, sino que trabajan por energía vibratoria. Las diferentes situaciones o problemas que se nos presenten en la vida, pueden originar un desequilibrio en nuestro organismo. Las flores de Bach trabajan a nivel inconsciente. Su energía vibratoria nos recuerda quiénes somos y hasta dónde somos capaces de llegar. Esto nos ayuda a recobrar el equilibrio perdido. Situaciones de miedo, depresión, incertidumbre, desórdenes alimenticios, insomnio, ataques de pánico, ansiedad, etc., son sólo ejemplos de muchas de las patologías que pueden ser tratadas con este tipo de medicina.

La terapia floral puede ser un buen acompañante para el ser humano en cualquier etapa de su vida. Veamos ejemplos. A medida que evolucionamos desde muy pequeños, las flores pueden ayudarnos en cambios como la aparición de la dentición, controlar los esfínteres, aprender a gatear y a caminar, etc.

También son beneficiosas cuando estamos estudiando. Tomar esencias flores cuando nos estamos preparando para algún examen o para presentar un proyecto de grado, ayuda a retener el conocimiento que estamos aprendiendo y nos mantiene en calma, de manera que los nervios no nos traicionen y nos hagan una mala jugada justo el día de la evaluación.

Por otro lado, cuando se presentan situaciones de cambio muy drástico en nuestras vidas (ejemplo, la muerte de un ser querido, un divorcio, una mudanza o cambio de país, etc.), tomar esencias florales nos permite mantener la cordura y serenidad. Adicionalmente, nos proporciona claridad ante la toma de decisiones.

La terapia floral genera en nosotros nuevos estados de conciencia, mejorando nuestra calidad de vida física, emocional y espiritualmente.

¿Cómo tomar las flores de Bach?

Los concentrados florales del Dr. Bach constan de 38 esencias acuosas de plantas y árboles silvestres no venenosos, que se vinculan a diferentes estructuras anímicas del ser humano. El terapeuta, previa consulta realizada al paciente, elegirá de 5 a 6 esencias florales para tratar una situación determinada.

Con las flores seleccionadas se elaborará un preparado en un frasco con gotero, y se darán las instrucciones de uso al paciente. Los preparados de esencias florales se deben tomar varias veces al día y en forma de gotas. Estos tratamientos suelen durar varias semanas, inclusive hasta meses, dependiendo de cada patología. Las fórmulas suministradas al paciente varían a medida que evoluciona el tratamiento.

Recordemos que se trata de una terapia paulatina y natural que ayuda a solucionar bloqueos existentes en el campo físico, previo restablecimiento del equilibrio anímico y energético.

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Efectos secundarios de las flores de Bach.

Muchas personas se preguntan si, las flores de Bach tienen contraindicaciones. La respuesta es que estas esencias no son perjudiciales para la salud y pueden utilizarse en conjunto con la medicina alopática.

Algo que pudiese suceder es que, al iniciar una terapia floral, se produzcan efectos un tanto desagradables que desaparecerán en el corto plazo. Es por esta razón que debemos acudir a un profesional debidamente capacitado en este tipo de tratamientos. Él se encargará de evitar cualquier síntoma molesto o por lo menos minimizarlo. En cualquier caso, no estamos hablando de malestares de gran relevancia.

Por el contrario, las flores de Bach, ayudan a detectar y corregir el origen de la enfermedad. Es por este motivo, que propician una curación profunda y perdurable en el tiempo. Atiende el origen de la enfermedad, y no el síntoma de la misma.

La terapia floral puede ser un excelente aliado en cualquier momento de tu vida. Los beneficios que puedes obtener son duraderos en el tiempo. Lo importante es que te asesores con terapeutas debidamente capacitados.

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